lunes, 20 de diciembre de 2010

Vejez




También están los que prefieren no ver.



sábado, 18 de diciembre de 2010

Nuestros recursos desconocidos


No hay nada más al pedo que un cacho de agua estancada en una pileta.
Es como un pedazo de Universo que no tiene razón de ser.



Indecisa entre caer o esperar, no fluye ni reflexiona.



Y es así: hay pedazos de Universo que no aprovechamos,

partes muy nuestras

estancadas en lo Desconocido

esperando

desde la negritud

que abramos la canilla.

Festejo lejano





Todo era un caótico desenfreno

como siempre.



Y yo al costado de la fiesta

neutralizando el Tánatos

conteniendo la rabia

y alejado de la algarabía

como siempre.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Atrapasueños



...liberando ilusiones
para que florezcan
en otras conciencias
que las merecen más que yo...





domingo, 3 de octubre de 2010

El río y yo

Volví al río.

A las aguas inquietas que no me mojan
y los susurros del viento empantanado

***La combinación adecuada para los días ajenos***

Atención sostenida: todoesUno.

(control y abandono en perfecta armonía)

En las orillas caprichosas de las tardes de domingo,
uno sólo es dueño
de sus obstinados silencios...


jueves, 15 de abril de 2010

Arroz perpetuo


"Que todas las noches



sean noches de boda



Que
todas las lunas


sean lunas de miel..."

domingo, 11 de abril de 2010

Sanador Herido


Mi sangre es la Llave.

Crear anticuerpos
es como enseñar lo aprendido
y aprender lo enseñado.


Soñar y jugar

no se diferencia demasiado

del espeso procedimiento

de librar batallas

en las entrañas.
..

jueves, 18 de marzo de 2010

Lluviona

Llueve obstinadamente en las capitales,
como si el agua cayente
fuera condición indispensable
para saciar los bebederos episcopales
de las cataratas sanguíneas.

Juego. Balbuceo las gotas del lamento sagrado...
(y me deslizo con cuidado para no caerme)

No sé por qué, pero la ciudad
se me vuelve más hermosa
cuando llueve.

sábado, 13 de marzo de 2010

El Visitante


Siempre que estoy por dormirme
alguien entra por mi ventana y me empuja.
No es como en el viejo departamento,
digamos, no en ese nivel tan evidente.

Pero, oh bendito pliegue interdimensional,
el duende escaramuzo interrumpe mis noches.
Y no es que uno lo espere
ni mucho menos.

Hay, en el portal del dormir,
un ser estirado arriba de mi cama.
Quisiera aprender más de él,
pero apenas me muevo
se evapora y desaparezco.

No es tan fácil arrebatarles palabras a los espectros. ¿Que dirán de nosotros, allá, en el Otro Lado?

Siempre que estoy por dormirme
alguien entra por mi ventana y me empuja.
Y me recuerda,
con un par de manos sutiles,
cuán nimio
y cuán importante es
andar como loco
por la Rueda del Mundo

haciendo cosas
imperiosamente necesarias
y a la vez
absolutamente intrascendentes.

viernes, 12 de marzo de 2010

Vaivenes

Y el motor se detiene.

¿Entonces qué?

¿Susurrar a los relojes?

¿Adornar las musarañas?

¿Gorgojear volátiles tigresas?

¿Usar pretextos para retomar el ajetreo?

No.


No.


Todo tiene su ritmo.

Hoy, me bajo de los andenes militantes
para retomarlos después.

Hoy, juego a conservar las fugaces formas
mientras me disuelvo
meticulosamente
en este teclado.


Pero como siempre y cada tanto
estoy agazapado

esperando dar el próximo zarpazo...


martes, 9 de marzo de 2010

Shakti


Volví.


No hace mucho tiempo
experimenté la soledad
a través de un comentario ajeno.
Fue como encamarse con un espantapájaros

todo trivial y absolutamente premeditado.



Descubrí lo que no quería.


Después de lo espasmódica que fue la cena,
ahí estaba esa cosa,
viscosa y trunca,
saladas las arterias.

Estaba sola.
(y para más detalles, gorda y triste).


...

Podría pensar
que soy yo
que me corresponde ser así
que hay una relación entre uno y otro.

Pero no.

No hoy.

Ya no.

(Juro que respiro hondo
siempre que lo siento
En cierta forma lo recuerdo.
No sé.
Quizás.
Quién sabe)


En estos días,
me guardo para Ella.

Desperezo mis letargos
y perfumo mis tigres algodonados

porque

(y esto es desde hace un rato)

desde el filo sinuoso
de mis pestañas

presiento un Amor
acercándose a mis orillas...