jueves, 12 de junio de 2014

Huertita


Regar la huertita todas las mañanas,
(lejos de ser una rutina robótica)
es saludar a la Noche y su Abundancia,
tirar un beso al aire,
ver cómo se despliega en una onda infinita
y llega hasta la estrella del alba.


Es amanecer poniéndose siempre al servicio.


Entender
desde ese lugar donde las palabras sobran
que nada involuciona, que todo tira siempre para arriba
que los achaques
no son más que un bamboleo
entre luna y luna...


Regar la huertita todas las mañanas
es agradecer al Misterio que nos nutre.







No hay comentarios.: